Refaccionar la casa antes o venderla como está

Refaccionar la casa: ¿Antes de vender o dejarla tal cual?

Mejorar cocina, baño y living antes de vender insumiría unos $18 millones. Hay créditos por $ 40 millones y podría mover su valor entre un 10% y 15%.

La importancia de refaccionar

Vender una propiedad puede ser un desafío, especialmente en el competitivo mercado inmobiliario argentino. La decisión de refaccionar antes de ponerla en el mercado puede marcar una gran diferencia en el valor final de la propiedad. Entre las áreas más críticas para mejorar, se destacan la cocina, el baño y el living. Estas son las zonas que más impactan en la percepción del comprador.

¿Cuánto cuesta refaccionar?

Refaccionar puede requerir una inversión significativa, estimándose en unos $18 millones. Sin embargo, esta inversión puede resultar en un aumento del valor de la propiedad de entre el 10% y el 15%. Con los créditos disponibles de hasta $40 millones, muchos propietarios pueden acceder a financiamiento que les permita realizar estas mejoras.

Beneficios de refaccionar

Al refaccionar tu casa, no solo estás mejorando su aspecto, sino también su funcionalidad. Una cocina moderna, un baño renovado y un living acogedor son clave para atraer a potenciales compradores. Además, las mejoras estéticas pueden aceleran la venta y ayudar a cerrar tratos más rápidamente.

Vender como está: pros y contras

Si decides vender tu propiedad tal cual, puede ser una opción más rápida y sin mayores complicaciones. Sin embargo, es probable que el precio de venta se vea afectado, ya que los compradores suelen descontar el costo de las reformas necesarias. Esto puede resultar en una venta a un precio inferior al que podrías obtener si decidieras invertir en refacciones.

Conclusiones finales

Decidir entre refaccionar y vender como está es una decisión estratégica. Si bien refaccionar implica una inversión inicial, el retorno puede ser significativamente mayor al momento de la venta. Evaluar tus opciones y el contexto del mercado te permitirá tomar la mejor decisión para maximizar el valor de tu propiedad. Recuerda que cada situación es única, ¡así que analízala bien antes de dar el paso!